Excelsitud. La vida, como tal y sus infinitas y diferentes manifestaciones e interrelaciones, posee características muy propias que muchas veces exceden los límites de la comprensión de la ciencia. Uno de estos fenómenos maravillosos es la excelsitud, que se podría describir como en pocas palabras como «la vida hace posible la vida». Basta ingresar a un bosque húmedo tropical o bucear en un arrecife coralino para darse cuenta de que no hay un solo milímetro de espacio desocupado en el entorno: todo hierve en formas de vida, la gran mayoría aún no estudiadas ni identificadas. El tronco de un solo árbol sirve de soporte y hogar para miles de plantas en cuyas hojas y tallos se forman infinidad de líquenes y de hongos, entre cuyos tejidos a su vez se forman complejas comunidades de algas y plantas primitivas, etc. Toda forma de vida es hogar y sustento de incontables criaturas. Desde hace más de 100 años, miles de científicos de todo el mundo han asumido el reto de dedicar sus vidas enteras a la labor de inventariar la totalidad de formas de vida existentes dentro de un determinado espacio en los bosques tropicales, sin éxito… Manuel Víquez Carazo. Director de Biodiversidad, La Marta Refugio de Vida Silvestre.