Fomento al desarrollo local. Desde sus inicios como refugio de vida silvestre en 1991, La Marta siempre ha tenido como principio fundamental el desarrollo socioambiental, lo cual significa que todas las actividades que se lleven a cabo en el refugio, deben ser diseñadas de tal suerte que las comunidades vecinas de Pejibaye, Plaza Vieja, El Humo y Tucurrique, deben ser tomadas en cuenta.
De esta forma, a lo largo de todos estos años, todas las labores de infraestructura, remodelación, conservación, vigilancia, educación, atención del turismo y servicios varios que se han llevado a cabo en La Marta, se han llevado a cabo adquiriendo todos los bienes y contratando todos los servicios en los comercios y grupos locales, en primera instancia.
El refugio y las comunidades vecinas deben mantener excelentes relaciones, para beneficiarse y protegerse mutua y simultáneamente. La sociedad costarricense vive tiempos sociales, económicos y ambientales muy complicados en donde la estabilidad de las áreas silvestres y de las comunidades rurales, se encuentra severamente amenazada por la crisis climática, el crimen organizado, el narcotráfico y las migraciones, por lo que la firme y estrecha relación comunidad – refugio es una forma de garantizar la mutua y permanente estabilidad.
Manuel Víquez Carazo. Director de Biodiversidad, La Marta Refugio de Vida Silvestre.